Ryanair es la única âgrandeâ de las aerolÃneas europeas que se ha comprometido a mantener los puestos de trabajo de su plantilla, si esta aceptaba un recorte salarial. Ha ocurrido en casi todas las bases, pero en Alemania, inicialmente, los pilotos votaron en contral. Y Ryanair, con su estilo crudo y descarnado, dijo que cerraba la base de Tegel, Dusseldorf y Hahn y que ahà se quedaban los empleados.
La amenaza funcionó: durante este ficn de semana, el personal de Ryanair votó en contra de sus decisión previa y este lunes se lo comunicó a Ryanair que dijo que reconsideraba su decisión de cierre de las bases y que se mantendrÃa operativa. AsÃ, pues, habrá recorte salarial, pero no despidos. O no más que unos pocos, ya aceptados.
De esta manera, según Michael OâLeary, que está demostrándose un âmaestroâ en la gestión de la crisis, mantendrá el 85 por ciento de sus pilotos y el 75 por ciento de su personal de cabina, pese a la crisis.
Obviamente, ese personal no cobrará lo mismo que antes, pero tendrá empleo, cosa hoy extremadamente incierta en un mercado absolutamente en el caos.
Anteriormente, los pilotos asociados a Balpa, el sindicato dominante en Gran Bretaña, habÃan aceptado recortes, al igual que el personal de cabina. Con estos acuerdos, se marcaba el camino para que la irlandesa sobrevivir.
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