Sevilla acoge estos dÃas a miles de aficionados alemanes y escoceses con motivo de la celebración de la final de la Europa League entre el Eintracht de Frankfurt y el Rangers. Unos 150.000 fanáticos de estos clubes abarrotan algunos puntos turÃsticos, como la Iglesia de El Salvador o lo bares del Paseo Colón. (Se disparan los precios hoteleros en Sevilla por la final de la Copa del Rey)
Esta movilización masiva esta suponiendo un impulso económico para la ciudad. Según cuenta El PaÃs, el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, cifra el impacto en unos 60 millones de euros. Además, se traduce en una gran visibilidad del destino, ya que el partido tendrá más de 150 millones de espectadores potenciales de 173 paÃses distintos.
Los hosteleros de la ciudad están encantados. La responsable del bar Kepler informa que âhemos quintuplicado las peticiones de cerveza, vodka y whisky. Abrimos más temprano para adaptarnos a sus costumbres y están alucinando con los vaporizadores que tenemos en nuestra terrazaâ. De hecho, se han visto obligados a reforzar la plantilla como si fuera un fin de semana.
Sin embargo, Sevilla ha de pagar un peaje por alojar a todos estos turistas: el archienemigo turismo de excesos. Los aficionados de sendos equipos son clásicos consumidores de alcohol y fanáticos de las imprudencias, lo que ha obligado a reforzar la presencia policial en los lugares donde se encuentran.
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