La ruta del Príncipe Harry en Las Vegas, hasta que le pillaron desnudo

Si se reserva un viaje a Las Vegas antes de este sábado, muchos touroperadores británicos ofrecen descuentos de hasta el 10%. Es el ‘Efecto Harry’, pues las correrías del hijo menor del Príncipe Carlos de Inglaterra en suelo estadounidense han aumentado un 30% el interés de sus compatriotas por la ciudad del juego.

Así lo ha asegurado a The Telegraph el mayorista Virgin Holidays, que ha preparado un paquete especial que permite alojarse en el mismo hotel que el Príncipe Harry y llevarse un bañador, crema solar de factor 50, una bebida energética y una lección de ‘strip-billar’.

Y es que el hermano del heredero de la corona británica disfrutó de una partida de ‘strip-billar’ en la piscina del Wynn Hotel, donde le han ‘robado’ una fotografía desnudo que ha dado la vuelta al mundo y ha puesto en jaque a su Casa Real.

La prensa inglesa ha desgranado los detalles de las vacaciones de Harry en Las Vegas. Y el diario El Mundo ha recopilado los datos, reproduciendo la ‘ruta’ del Príncipe entre el 17 y el 21 de agosto, día de la ‘pillada’ indiscreta.

Harry y dos amigos suyos llegaron al Wynn Hotel el viernes 17 de agosto y se alojaron en uno de los bungalows, a 950 euros la noche. Allí pasaron largas horas en el casino. Luego se trasladaron a una suite de 582 metros cuadrados, cuya tarifa ronda los 7.000 euros diarios.

Al día siguiente, se entretuvo en la fiesta de la piscina Wet Republica en compañía de 10 amigos y de Jennifer López, además de coqueteando con otras chicas en el recinto. El domingo llegó el turno del Encore Beach Club y otra fiesta junto a la piscina. Harry y sus colegas estuvieron en su bungalow privado, equipado con bañera de hidromasajes, pantalla plana, videoconsolas, zona spa y nebulizadores para refrescar el ambiente.

Acabado el fin de semana, la fiesta no acabó para Harry de Inglaterra, que el lunes ‘compitió’ con el medallista Ryan Lochte en la piscina del club nocturno XS y luego dedicó el resto de la noche a la juerga con sus amigos. Así llegó al martes, cuando decidió invitar a su suite privada a un grupo de féminas y organizó una partida de ‘strip-billar’, con tan mala suerte que perdió el juego y acabó como Dios lo trajo al mundo.

Un objetivo indiscreto del móvil de alguien que se encontraba en la fiesta captó al príncipe Harry totalmente desnudo  y la imagen acabó publicada en la web TMZ. El final de las vacaciones, redes sociales mediante, es historia.