Los Tata crearán un ‘grande’ indio en la aviación mundial

 

El grupo Tata de India, conocido por su industria metalúrgica y la fabricación de coches, era hasta hace poco el propietario de Vistara, una gran aerolínea india. Empezó como una low cost a medias con Singapore Airlines que sabe mucho de esto, y se ha convertido en una de las aerolíneas punteras. Tata también tiene una participación mayoritaria en AirAsia India. AirAsia es una low cost del sureste asiático en la que Tata no tiene propiedad, pero sí en su filial india (Air India, en la ruina, vuelve a manos de la familia fundadora).

Lo que cambiado todo ha ocurrido hace unos meses. La familia Tata, que en su momento había fundado Air India, fue la única que presentó una oferta para quedarse con la aerolínea de bandera del país, después de que el Estado, con una pésima gestión, la dejara sin reputación y sin reservas. Los Tata volvían a tener la propiedad para reorganizar el caos. Con Air India venía Air India Express, igual que con Iberia viene Iberia Express.

Ahora, la familia ha dejado saber que las cuatro líneas aéreas, Air India, Air India Express, Vitara y AirAsia India, se van a fusionar para hacer una gran aerolínea india, en la que se conservará la presencia de Singapore Airlines, aunque se evalúa su dimensión. La marca Vistara desaparecerá y todo quedará bajo el paraguas Air India. Esto todo tendrá lugar en 2023.

Según ha publicado Bloomberg, el primer paso será la disolución de AirAsia India en Air India, que será la aerolínea definitiva de los Tata y de la India.

Obviamente, la parte más compleja de la fusión es la integración de Vistara en Air India, lo que obligará a que Air India deje de ser la estructura caótica que había venido siendo.

Toda unida, Air India será una de las mayores aerolíneas del mundo, compitiendo sin problemas con las grandes del Golfo Pérsico y, además, con un mercado interior brutal.