El Parlamento británico aborda las condiciones laborales en la low cost Ryanair

Luciana Berger, diputada por Liverpool (Reino Unido) ha llevado al Parlamento británico la denuncia de una T de Ryanair, Sophie Growcoot, acerca de sus condiciones laborales en la aerolínea irlandesa. Entre otras cosas, la azafata asegura haber trabajado días sin cobrar.

Según recoge El Confidencial, la empleada de la low cost presidida por Michael O’Leary había declarado al diario The Independent que, cuando entró a trabajar como personal de cabina “estaba muy ilusionada” pero “pronto todo se convirtió en una pesadilla. Cuando me dijeron que tenía que trabajar varios días sin cobrar no podía creérmelo”.

Growcoot asegura que, aunque la compañía solo le daba trabajo nueve meses al año, le impedía buscar otro empleo temporal durante su baja y tampoco le ofrecía ningún salario compensatorio. Además, en los tres meses en los que no tenía actividad en Ryanair, la aerolínea supuestamente la obligó a pagarse un curso sobre seguridad laboral de 2.000 euros, además de que ya había tenido que costearse el uniforme, otros 426 euros.

La T añade que no se le pagaban los viernes de guardia ni el tiempo de actividad en el aeropuerto ni las horas en caso de retraso del vuelo. Para Sophie Growcoot, la situación vivida ha sido de “auténtica tomadura de pelo para mí y mis compañeros”. La mujer se plantea ahora acudir a los tribunales para imponer una denuncia judicial.

Por su parte, la diputada Berger afirmó ante la cámara de representantes del Reino Unido que Ryanair “explota a su personal laboral” mientras sus beneficios crecen. En 2012, lo hicieron un 10%, de hecho. Entre tanto, la compañía aérea se ha defendido de las acusaciones apuntando que son “falsas” y que la trabajadora prestaba sus servicios a través de una subcontrata. Lo que no ha aclarado Ryanair es que esa empresa, Crewlink, es filial suya.