Las 10 medidas que necesita el turismo español para sobrevivir

Un nuevo informe de Exceltur muestra con cifras la agónica situación que atraviesa la industria turística. La pandemia ha supuesto la pérdida de 116.402 millones de euros y 841.436 puestos de trabajo se han visto afectados.

De cara al verano, la previsión, sujeta a múltiples factores exógenos, es lograr un PIB turístico aún un 34% inferior a los niveles de 2019 (19.803 millones menos que en el mismo trimestre de 2019).

Aprovechando la presentación de los resultados de su último informe, el potente lobby turístico ha hecho hincapié en las que su juicio son las diez medidas clave para lograr la ansiada reactivación del turismo esta temporada estival. Son las siguientes:

1. Agilización y ampliación presupuestaria del plan de ayudas directas del Gobierno al turismo. Dentro de este punto, insta al Ejecutivo a revisar las 95 ramas de actividad de la CNAE (la gran mayoría no turísticas) que dan derecho a la recepción de las ayudas, para tratar de elevar la cantidad resultante que realmente llegue a las del sector más perjudicado; ampliar los porcentajes de ayudas establecidos para empresas pequeñas de menos de 10 trabajadores; elevar los límites máximos de las ayudas para medianas y grandes empresas, fijados en unos exiguos 200.000 euros; crear un mecanismo de inyección financiera urgente; y establecer idealmente unos criterios mínimos de reparto homologables para todas las comunidades autónomas (El nuevo plan de ayudas, “una gota en el océano de la crisis”).

2. Acelerar al máximo la vacunación general y facilitar el gratuito a los test de antígenos. Adicionalmente, una vez cubiertos todos los grupos de mayor riesgo, priorizar la vacunación ciudadana en las comunidades más dependientes del turismo extranjero y del propio personal del sector en o con el turista, igual que ocurre en otros países competidores (Italia, Grecia, Malta, Chipre y Turquía) (Los rivales de España blindan sus destinos con vacunas).

3. Asegurar que los términos y alcance final del Certificado Verde Digital (CDV) de la UE sean el instrumento vinculante preciso para la mayor movilidad turística, evitando medidas restrictivas unilaterales (cuarentenas) al regreso a los países origen (Pasaporte de vacunación: nuevo fracaso de la UE para salvar el verano turístico).

4. Procurar acuerdos bilaterales con efectos similares a los CVD con los principales países/mercados turísticos en origen para España fuera del espacio Schengen, bien de manera unilateral o multilateral (vía OCDE).

5. Reforzar la exigua inversión en la campaña de promoción internacional de verano de Turespaña, así como otras medidas de estímulo a la demanda en general (reducción de tasas aéreas y turísticas, etc.) y a la demanda interna (Bonos de Viaje e Imserso).

6. Extender el actual sistema de ERTE hasta diciembre de 2021, mientras se diseña uno de carácter más estructural.

7. Perseguir de manera más decidida las irregularidades y la pésima imagen de bajo control sanitario que están brindando los pisos turísticos con sus fiestas conexas en múltiples ciudades y destinos de sol y playa españoles (no sólo Madrid).

8. Asegurarse que, al terminar el próximo estado de alarma, no se generen actuaciones contradictorias y/o insuficientes en las distintas comunidades para garantizar que sigue la contención del virus en toda España y no se diluya la confianza para viajar o resurjan restricciones perimetrales que condicionen la movilidad interna o la externa.

9. Procurar una mayor y mejor asignación al turismo de recursos Next Generation, más proporcionado a su peso del 12,4% sobre la economía y a la gran magnitud de sus retos estructurales pendientes. Evitar dispersarse en iniciativas de poco calado o valor añadido, repartiendo fondos exiguos entre múltiples beneficiarios que generen bajos efectos tractores.

10. Obviar la inexplicable omisión y añadir a los 6 inicialmente destacados, un PERTE como mínimo para el turismo, dedicado a la reconversión de destinos maduros del litoral (las grandes fábricas del turismo) que suponen nada menos que el 8,5% de la actividad y el 8,8% del empleo de toda la economía española.