Todos los detalles sobre la puesta a punto del gigante A380 en Barajas

La puesta a punto del gigantesco A380 es mucho más compleja que la de otros aparatos de menor tamaño. Expansión ha compartido cómo es el proceso de preparación de la aeronave, desde su llegada al aeropuerto, en este caso Barajas, hasta que vuelve a salir hacia su siguiente destino (El lugar perfecto para ver de cerca un A380 en acción).

Pone como ejemplo un día cualquiera en el que el A380 de Emirates aterriza en la Terminal 4S de Madrid a las 13:43 horas, marcando el inicio de una frenética pero coordinada operación. Equipado con cámaras y pantallas que guían al piloto hasta el punto exacto de detención, el gigante aéreo debe estar listo para su próximo vuelo a Dubái en tan solo 105 minutos, gracias a un equipo de más de 50 personas que trabaja sincronizadamente.

La llegada del A380 desencadena una gran sucesión de actividades. Equipos de mantenimiento, manejo de carga, limpieza, catering y repostaje, todos vestidos con chalecos reflectantes y calzado de seguridad, se movilizan simultáneamente para cumplir con sus respectivas tareas. La operación es supervisada por Sergio de la Torre, el manager de servicios aeroportuarios de Emirates, quien lleva 36 años trabajando en el aeropuerto de Madrid. Su jornada comienza verificando la puntualidad del vuelo y coordinando cualquier ajuste necesario en caso de retrasos.

Una de las tareas más críticas es el repostaje del avión, que consume cerca de 100 toneladas de combustible en su ruta de Madrid a Dubái. Mientras tanto, los ingenieros de mantenimiento realizan revisiones exhaustivas para asegurar que el avión esté en condiciones óptimas. Otros equipos se encargan de vaciar los depósitos de aguas residuales y llenar los tanques de agua potable, esenciales para los servicios de primera clase que incluyen duchas.

La gestión de la carga es otro pilar fundamental. Sergio de la Vara, del equipo de handling, asegura que el equipaje y otros envíos, que pueden incluir desde maletas hasta objetos tan inusuales como coches de lujo y animales marinos, sean colocados correctamente en el avión. Todo está minuciosamente organizado para garantizar que el equipaje de primera clase y business sea el primero en salir.

El servicio de catering, liderado por Joaquín Santo, despliega una operación meticulosa para abastecer al avión con más de 500 bandejas de comida y otros suministros. Sus dimensiones son tales que es necesario usar camiones especialmente diseñados para alcanzar la planta superior del A380.

Finalmente, el equipo de limpieza, compuesto por 28 personas, tiene 35 minutos cronometrados para dejar el avión impecable. Una vez terminada su labor, la tripulación, que puede estar compuesta por de más de 160 nacionalidades, se prepara para el embarque de los nuevos pasajeros, una operación que se completa en 20 minutos.

A las órdenes de Sergio de la Torre, este complejo ballet de tareas se ejecuta diariamente, demostrando una impresionante eficiencia y coordinación que asegura que el A380 de Emirates esté listo para despegar, llevando consigo a más de 500 pasajeros hacia su destino.